Canción: QUIERO AMARTE PARA SIEMPRE
Toma mi mano,
mirame a los ojos,
con ternura sonríeme,
con lentitud acaríciame,
y solo escucha con tu corazón
lo que tengo que decirte
del fondo del mío
y es que:
CORO
- Quiero amarte para siempre
aunque tu no quieras no pienso perderte
- Quiero amarte para siempre
porque sin tu amor yo nunca estoy alegre
- Quiero amarte para siempre
porque moriría si no puedo verte
- Quiero amarte para siempre
porque si no estas, no sé cual sea mi suerte.
Porque si no estás
no tengo vida
no encuentro salida
no puedo escapar
y esta soledad me va a matar
por eso...
CORO
- Quiero amarte siempre
aunque tu no quieras, no pienso perderte
-Quiero amarte siempre
porque sin tu amor yo nunca estoy alegre
- Quiero amarte para siempre
porque moriría si no puedo verte
- Quiero amarte para siempre
porque si no estas, no sé cual sea mi suerte.
Autora: Saray Llorente A.
Poema: LA SONRISA DE DIEGO
En su cara de niño
se refleja un gran cariño.
Su sonrisa feliz
es la de un gran aprendiz,
es una gran alegría
contar con esta dulce compañía
que nos llena los días de luz y armonía.
Su dulce sonrisa es una delicia
sus manos de niño son una caricia
que le dan al mundo un hermoso color
donde la fantasía se combina con la ternura y el amor
Autora: María Alejandra Arrieta
Cuento: LOS PAISES LUCHADORES
Erase una vez un niño que le gustaba leer mucho y un día como todo se puso a leer y se quedo dormido, acostado el soñaba una cosa horrorosa: era un sol que destruía una capa muy preciada que es nuestra capa dorada, el niño en su sueño, soñaba que había un país que se llamaba atmósfera; este país no estaba tan destruido como el país de ozono. Este país estaba en guerra con unos objetos muy peligrosos llamados basuras y humo que eran aliados de los seres humanos contaminantes, este ejército estaba atacando a todo el país y ellos al verse derrotados no se cansaban, seguían combatiendo con la misma fuerza. Habían dos desechos muy peligrosos que eran el ser humano y la basura, que eran los máximos jefes contaminantes, ellos buscaban y peleaban, pero no lograban nada, no podían vencerlos.
Algunos humanos contaminantes eran buenos pero los demás no lo eran, al pasar dos mese de ardua batalla. El país ozono pidió ayuda al país atmosfera y el país atmosfera le dijo: cuentas conmigo, el país ozono recupero fuerzas contra los desechos y humanos contaminantes, la guerra fue muy fuerte. Cuando obtuvo el nombre de “APOCALICONTAMINANTE”, los países unidos se pararon firmes, pero con pocas fuerzas, sin embargo dieron la pelea y los humanos buenos hacer campañas de orientación a los seres humanos malos.
Hubo un humano bueno llamado IVANCO que significa (Institución Voluntaria Anticontaminante) que convirtió a miles humanos malos en buenos y los países Atmosfera y Ozono recuperaron fuerzas pero ya era tarde, el sol los agotaba cuando entraba sus rayos muy penetrantes; los soldados fueron muriendo, sus riso fueron secando, hasta que IVANCO protector, se paro firme y se armo bien; se equipo son seis soldados humanos buenos que sobrevivieron; eran seis contra males y la pelea continuo y lo que parecía imposible se fue logrando: los países Atmosfera y Ozono se recuperaron muy bien y ayudaban a sus amigos.
El país Ozono y el país Atmosfera, junto con IVANCO y sus seis amigos lograron lo querido: ambos países se recuperaron bien y ganaron la pelea. Al recuperarse los rayos del sol no entraron más con la misma intensidad.
El niño que estaba dormido; al levantarse y al ver su sueño tan espantoso alerto a la gente de su vecindario y empezaron en nuestro planeta a acabar con la contaminación.
Autor: Iván Martínez.
Cuento: EL HOMBRE Y SU INFLUENCIA HACIA LA TIERRA.
Erase una vez, en un planeta muy hermoso y lleno de vida llamado Tierra, en donde había animales de todas las especies que convivían en paz, que andaban libre por todas las partes sin que nadie o nada los molestara. Todo el mundo estaba lleno de bosques, había abundancia en alimentos para todos los seres vivos; los peces no eran molestados y no había escases de ellos.
Todo el planeta estaba en equilibrio, hasta que un día apareció “el hombre”, que comenzó a arrasar todo lo que encontraba en su camino, taló muchos bosques, quitándole el hogar a muchos animales, no utilizaba bien las fuentes de alimentos, los explotaba de una manera indiscriminada; todo con el fin de enriquecerse, y no se daba cuenta el daño que le hacía a la tierra.
Mientras el hombre iba desarrollando su conocimiento, iba inventando nuevos aparatos para su beneficio personal, pero estos nuevos inventos iban contaminando a toda la tierra y la capa de ozono se iba deteriorando, los rayos del sol llegaron a la tierra con más fuerza que antes, y eso comenzó a variar el clima en todas las partes del mundo, los polos comenzaron a derretirse y en las zonas costeras no se podía vivir, porque eran muy calientes para los seres vivos.
El derretimiento de los polos ocasionó inundaciones en las ciudades y en los pueblos que estaban al nivel del mar, gracias al daño que le hizo el hombre.
El hombre no le prestaba atención a estas cosas, y acabó con la vida en la tierra, ya que ella se puso muy caliente, hasta matar a los seres vivos.
Cuando mi madre me llamo desperté y sentí un gran alivio al ver que era solo un sueño.
Para que se pueda evitar esto, el hombre debe cambiar su estilo de vida, tiene que saber aprovechar mejor los elementos de la tierra, cambiar la fuente de contaminación que utiliza para poder hacer funcionar sus maquinas, ya que son la mayor fuente de contaminación del mundo. Para que esto funcione, todas las personas tiene que participar de alguna manera, tiene que ahorrar agua, no utilizar mucha energía, no seguir con la tala de árboles, entre muchas cosas más; para poder tener una vida plena y mejor.
Autor: Camilo Alberto Zúñiga Vergara
Cuento: LOS PAISES LUCHADORES
Erase una vez un niño que le gustaba leer mucho y un día como todo se puso a leer y se quedo dormido, acostado el soñaba una cosa horrorosa: era un sol que destruía una capa muy preciada que es nuestra capa dorada, el niño en su sueño, soñaba que había un país que se llamaba atmósfera; este país no estaba tan destruido como el país de ozono. Este país estaba en guerra con unos objetos muy peligrosos llamados basuras y humo que eran aliados de los seres humanos contaminantes, este ejército estaba atacando a todo el país y ellos al verse derrotados no se cansaban, seguían combatiendo con la misma fuerza. Habían dos desechos muy peligrosos que eran el ser humano y la basura, que eran los máximos jefes contaminantes, ellos buscaban y peleaban, pero no lograban nada, no podían vencerlos.
Algunos humanos contaminantes eran buenos pero los demás no lo eran, al pasar dos mese de ardua batalla. El país ozono pidió ayuda al país atmosfera y el país atmosfera le dijo: cuentas conmigo, el país ozono recupero fuerzas contra los desechos y humanos contaminantes, la guerra fue muy fuerte. Cuando obtuvo el nombre de “APOCALICONTAMINANTE”, los países unidos se pararon firmes, pero con pocas fuerzas, sin embargo dieron la pelea y los humanos buenos hacer campañas de orientación a los seres humanos malos.
Hubo un humano bueno llamado IVANCO que significa (Institución Voluntaria Anticontaminante) que convirtió a miles humanos malos en buenos y los países Atmosfera y Ozono recuperaron fuerzas pero ya era tarde, el sol los agotaba cuando entraba sus rayos muy penetrantes; los soldados fueron muriendo, sus riso fueron secando, hasta que IVANCO protector, se paro firme y se armo bien; se equipo son seis soldados humanos buenos que sobrevivieron; eran seis contra males y la pelea continuo y lo que parecía imposible se fue logrando: los países Atmosfera y Ozono se recuperaron muy bien y ayudaban a sus amigos.
El país Ozono y el país Atmosfera, junto con IVANCO y sus seis amigos lograron lo querido: ambos países se recuperaron bien y ganaron la pelea. Al recuperarse los rayos del sol no entraron más con la misma intensidad.
El niño que estaba dormido; al levantarse y al ver su sueño tan espantoso alerto a la gente de su vecindario y empezaron en nuestro planeta a acabar con la contaminación.
Autor: Iván Martínez.
Cuento: EL HOMBRE Y SU INFLUENCIA HACIA LA TIERRA.
Erase una vez, en un planeta muy hermoso y lleno de vida llamado Tierra, en donde había animales de todas las especies que convivían en paz, que andaban libre por todas las partes sin que nadie o nada los molestara. Todo el mundo estaba lleno de bosques, había abundancia en alimentos para todos los seres vivos; los peces no eran molestados y no había escases de ellos.
Todo el planeta estaba en equilibrio, hasta que un día apareció “el hombre”, que comenzó a arrasar todo lo que encontraba en su camino, taló muchos bosques, quitándole el hogar a muchos animales, no utilizaba bien las fuentes de alimentos, los explotaba de una manera indiscriminada; todo con el fin de enriquecerse, y no se daba cuenta el daño que le hacía a la tierra.
Mientras el hombre iba desarrollando su conocimiento, iba inventando nuevos aparatos para su beneficio personal, pero estos nuevos inventos iban contaminando a toda la tierra y la capa de ozono se iba deteriorando, los rayos del sol llegaron a la tierra con más fuerza que antes, y eso comenzó a variar el clima en todas las partes del mundo, los polos comenzaron a derretirse y en las zonas costeras no se podía vivir, porque eran muy calientes para los seres vivos.
El derretimiento de los polos ocasionó inundaciones en las ciudades y en los pueblos que estaban al nivel del mar, gracias al daño que le hizo el hombre.
El hombre no le prestaba atención a estas cosas, y acabó con la vida en la tierra, ya que ella se puso muy caliente, hasta matar a los seres vivos.
Cuando mi madre me llamo desperté y sentí un gran alivio al ver que era solo un sueño.
Para que se pueda evitar esto, el hombre debe cambiar su estilo de vida, tiene que saber aprovechar mejor los elementos de la tierra, cambiar la fuente de contaminación que utiliza para poder hacer funcionar sus maquinas, ya que son la mayor fuente de contaminación del mundo. Para que esto funcione, todas las personas tiene que participar de alguna manera, tiene que ahorrar agua, no utilizar mucha energía, no seguir con la tala de árboles, entre muchas cosas más; para poder tener una vida plena y mejor.
Autor: Camilo Alberto Zúñiga Vergara
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